Consejos para el cuidado de las baterías de litio

La batería de litio es uno de los elementos de mayor importancia de los dispositivos electrónicos. Estos dispositivos están especialmente diseñados para almacenar la energía que el aparato precisa para funcionar. Las baterías de litio se caracterizan por sus componentes ligeros, una elevada capacidad energética, una resistencia a la descarga impresionante y un sistema que le permite funcionar durante gran cantidad de ciclos de regeneración, es decir, repetidas recargas. Pero no son dispositivos infalibles, por lo que conviene seguir una serie de consejos que garanticen una vida útil lo más larga posible. 

Seguramente te hayas fijado que las baterias de litio vienen cargadas, como norma general, con un 40% de batería. No se trata de una cuestión de azar, el 40% de carga de la batería es la capacidad recomendada si se va a mantener la batería inactiva durante un plazo de tiempo relativamente largo. 

A diferencia de lo que ocurría con anteriores generaciones de baterías, no es necesario cargar o descargar completamente la batería antes de empezar a utilizarla con normalidad. Conforme se completen los primeros ciclos de carga y descarga notarás que la capacidad de la batería aumenta hasta llegar a su punto de máxima capacidad. 

Las baterías de litio no tienen efecto memoria. De tal manera, es irrelevante cuando se recarga la batería que se llegue al 100% o no. En cambio, sí es importante el momento en el que se debe enchufar la batería a la red eléctrica para comenzar la recarga. Lo más dañino para una batería de litio es dejar que se descargue completamente. Por este motivo es muy recomendable que se comience a recargar la batería antes de que el nivel de batería descienda por debajo del 15%. 

Un aspecto relacionado con la recarga del dispositivo es el referente al momento de desenchufar la batería tras una carga. Ten en cuenta que no es relevante que se llegue al 100% del nivel de energía, pero es recomendable que una vez se alcance dicho porcentaje inmediatamente se desconecte de la red eléctrica la batería. De hecho, esta es la práctica que más suele estropear estas baterías. Cuando una batería alcanza el 100% de carga y permanece enchufada a la electricidad comienza a calentarse y pierde eficacia. 

Ten en cuenta que las celdas en las que se almacena la energía sufren una pérdida de capacidad irreversible, pero con un buen uso de la batería se puede minimizar el desgaste.